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2019-03-21: El arte de Bendecir

1. AIN KAREM: TALITA KUM
TALITA KUM (LEVÁNTATE),

TALITA KUM 

TALITA KUM (LEVÁNTATE),

TALITA KUM
 
Si el miedo silencia tu vida

durmiendo todos tus sueños

de un mundo justo y humano

en el que Jesús sea el centro.
 
 Si el ruido ensordece tu oído

sin dejarte escuchar su Palabra,

atrévete a ser tu mismo;

 

Si envuelto en el ritmo diario

no aciertas a hallar su presencia

recuerda que habita en ti mismo,

Él sana tu herida y te alienta.

2019-01-31: ¡Cristo habite por la fe en vuestros corazones!

Desde la invitación de la comisión de liturgia en este año a ser “transformados por Dios”, las lecturas del ritual católico nos invitan a experimentar esa transformación siendo nosotros los que damos el paso, no siendo obligados por Dios. Los textos bíblicos que tomamos de esta III Semana del Tiempo Ordinario nos invitan a “ser luz desde Dios”.
CANCIÓN: “Venid a mi … Que yo os aliviaré” (Sereca)
 
Hemos venido aquí esta tarde, ¿por qué?: por rutina, porque está en nuestro calendario, porque no tenía otra cosa mejor que hacer, porque tenía que hacer la oración, porque …., al final da igual lo que nuestro consciente haya puesto como motor para VENIR A ÉL.

María, la del Fiat.

 Hola María:

Hoy te recuerdo como esa niña de 15 años que permitió que llegara «mi» Jesusito a este mundo y que Él me llevara al Padre.

Recuerdo la primera vez que leí sobre la Anunciación, y eso que ya han pasado cuatro décadas, y parece que fue ayer.

2019-03-24 “Dios no castiga”

Evangelio según san Lucas (13, 1-9) En aquel tiempo llegaron a Jesús algunos que le contaron lo de los galileos, cuya sangre había mezclado Pilato con la de sus sacrificios. Les respondió Jesús: ¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que todos los demás galileos, porque acabaron así? No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo modo. O aquellos dieciocho sobre los que se desplomó la torre de Siloé matándolos, ¿pensáis que eran más culpables que los demás hombres que habitaban en Jerusalén? No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo modo. Les dijo esta parábola: «Un hombre tenía plantada una higuera en su viña, y fue a buscar fruto en ella y no lo encontró. Dijo entonces al viñador: «Ya hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo encuentro; córtala; ¿para qué va a ocupar terreno en balde?» Pero él le respondió: «Señor, déjala por este año todavía y mientras tanto cavaré a su alrededor y echaré abono, por si da fruto en adelante; y si no da, las cortas.»

2019-03-17 “Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle”

Evangelio según san Lucas (9, 28b-36) En aquel tiempo, Jesús se llevó a Pedro, a Juan y a Santiago y subió a lo alto de la montaña, para orar. Y, mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió, sus vestidos brillaban de blancos. De repente, dos hombres conversaban con él: eran Moisés y Elías, que, apareciendo con gloria, hablaban de su muerte, que iba a consumar en Jerusalén. Pedro y sus compañeros se caían de sueño; y, espabilándose, vieron su gloria y a los dos hombres que estaban con él. Mientras éstos se alejaban, dijo Pedro a Jesús: «Maestro, qué bien se está aquí. Haremos tres tiendas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» No sabía lo que decía. Todavía estaba hablando, cuando llegó una nube que los cubrió. Se asustaron al entrar en la nube. Una voz desde la nube decía: «Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle.» Cuando sonó la voz, se encontró Jesús solo. Ellos guardaron silencio y, por el momento, no contaron a nadie nada de lo que habían visto. 

El vencimiento último

 Afortunadamente no seremos juzgados por los conocimientos ni por los rituales religiosos  sino por haber vivido o no la compasión, la ternura, la misericordia y la solidaridad con nosotros mismos, en primer lugar, y con aquellxs que están a nuestro lado.. 

Todo se juega en este momento. 
El vencimiento último, la cita con lo eterno, ¡es hoy!.

2019-03-03 “No sólo de pan vive el hombre”

Evangelio según san Lucas (4, 1-13) En aquel tiempo, Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y el Espíritu lo fue llevando durante cuarenta días por el desierto, mientras era tentado por el diablo. En todos aquellos días estuvo sin comer y, al final, sintió hambre. Entonces el diablo le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan». Jesús le contestó: «Está escrito: “No sólo de pan vive el hombre”». Después, llevándole a lo alto, el diablo le mostró en un instante todos los reinos del mundo y le dijo: «Te daré el poder y la gloria de todo eso, porque a mí me ha sido dado, y yo lo doy a quien quiero. Si tú te arrodillas delante de mí, todo será tuyo». Respondiendo Jesús, le dijo: «Está escrito: “Al Señor, tu Dios, adorarás y a él solo darás culto”».  Entonces lo llevó a Jerusalén y lo puso en el alero del templo y le dijo: «Si eres Hijo de Dios, tírate de aquí abajo, porque está escrito: “Ha dado órdenes a sus ángeles acerca de ti, para que te cuiden”, y también: “Te sostendrán en sus manos, para que tu pie no tropiece contra ninguna piedra”». Respondiendo Jesús, le dijo: «Está escrito: “No tentarás al Señor, tu Dios”». Acabada toda tentación, el demonio se marchó hasta otra ocasión.

2019-03-10 “No juzguéis y no seréis juzgados”

Evangelio según san Lucas (6, 39-45) En aquel tiempo, Jesús ponía a sus discípulos esta comparación: ¿Podrá un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? No está el discípulo por encima del maestro. Será como el maestro cuando esté perfectamente instruido. ¿Cómo es que miras la brizna que hay en el ojo de tu hermano y no reparas en la viga que hay en tu propio ojo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano: `Hermano, deja que saque la brizna que hay en tu ojo’, si no ves la viga que hay en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo y entonces podrás ver para sacar la brizna que hay en el ojo de tu hermano. Porque no hay árbol bueno que dé fruto malo y, a la inversa, no hay árbol malo que dé fruto bueno. Cada árbol se conoce por su fruto. No se recogen higos de los espinos, ni de la zarza se vendimian uvas. El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca lo bueno, y el malo, de la maldad saca lo malo. Porque de lo que rebosa el corazón habla su boca.