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2014-11-02: Lectio Divina: «Yo soy el camino» (Conmemoración de todos los Fieles Difuntos)

DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 14, 1-6
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: -No perdáis la calma: creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas estancias, y me voy a prepararos sitio. Cuando vaya y os prepare sitio, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo, estéis también vosotros. Y a donde yo voy, ya sabéis el camino. Tomás le dice:
–Señor, no sabemos a dónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?

Lectio Divina 2014-10-26: El mandamiento más grande

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 22, 34-40
 
En aquel tiempo, los fariseos, al oír que Jesús habla hecho callar a los saduceos, formaron grupo, y uno de ellos, que era experto en la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba:
 
— Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?
 
Él le dijo:
 
–“Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser.» Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo.» Estos dos mandamientos sostienen la Ley entera y los profetas.
 
Palabra del Señor
 
 

Lectio Divina 2014-10-19: «Dad a Dios lo que es de Dios»

DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 22, 15-21
 
En aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta. Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes, y le dijeron: — Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad; sin que te importe nadie, porque no miras lo que la gente sea. Dinos, pues, qué opinas: ¿es lícito pagar impuesto al César o no? Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: — Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto. Le presentaron un denario. Él les preguntó: — ¿De quién son esta cara y esta inscripción? Le respondieron: — Del César. Entonces les replicó: — Pues pagadle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.
 
Palabra del Señor
 

Lectio Divina 2014-10-12: «Muchos son llamados, pero pocos elegidos»

LECTURA DEL EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 22, 1-14
 
En aquel tiempo, de nuevo tomó Jesús la palabra y habló en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: –El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisaran a los convidados a la boda, pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados, encargándoles que les dijeran: «Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas, y todo está a punto. Venid a la boda». Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios; los demás les echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos. El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados: «La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encontréis, convidadlos a la boda.» Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta y le dijo: «Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta?» El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los camareros: «Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.» Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos.
 
Palabra de Señor.
 

Lectio Divina 05-10-2014: «La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular»

DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 21, 33-43
 
En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:
 
— Escuchad otra parábola: Había un propietario que plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó en ella un lagar, construyó la casa del guarda, la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. Llegado el tiempo de la vendimia, envió sus criados a los labradores, para percibir los frutos que le correspondían. Pero los labradores, agarrando a los criados, apalearon a uno, mataron a otro, y a otro lo apedrearon. Envió de nuevo otros criados, más que la primera vez, e hicieron con ellos lo mismo. Por último les mandó a su hijo, diciéndose: «Tendrán respeto a mi hijo.» Pero los labradores, al ver al hijo, se dijeron: «Éste es el heredero: venid, lo matamos y nos quedamos con su herencia.» Y, agarrándolo, lo empujaron fuera de la viña y lo mataron. Y ahora, cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?
 
Le contestaron:
 
— Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará la viña a otros labradores, que le entreguen los frutos a sus tiempos.»
 
Y Jesús les dice:
 
— ¿No habéis leído nunca en la Escritura?: «La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente» Por eso os digo que se os quitará a vosotros el reino de Dios y se dará a un pueblo que produzca sus frutos.
 
Palabra del Señor.
 

Lectio Divina 2014-09-28: «¿Cuál hizo la voluntad de su Padre?»

DEL EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 21, 28-32
 
En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:
 
–¿Qué os parece? Un hombre tenía dos hijos. Se acercó al primero y le dijo: «Hijo, ve hoy a trabajar en la viña». Él le contestó: «No quiero.» Pero después recapacitó y fue. Se acercó al segundo y le dijo lo mismo. Él le contestó: «Voy, señor.» Pero no fue. ¿Quién de los dos hizo lo que quería el padre?
 
Contestaron:
 
— El primero.
 
Jesús les dijo:
 
— Os aseguro que los publicanos y las prostitutas os llevan la delantera en el camino del reino de Dios. Porque vino Juan a vosotros enseñándoos el camino de la justicia, y no le creísteis; en cambio, los publicanos y prostitutas le creyeron. Y, aun después de ver esto, vosotros no recapacitasteis ni le creísteis.
 
Palabra del Señor.
 

Lectio 2014-09-21: «Los últimos serán los primeros»

DEL EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 20, 1-16
 
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola:
 
— El Reino de los Cielos se parece a un propietario que al amanecer salió a contratar jornaleros para su viña. Después de ajustarse con ellos en un denario por jornada, los mandó a la viña. Salió otra vez a media mañana, vio a otros que estaban en la plaza sin trabajo, y les dijo: «Id también vosotros a mi viña, y os pagaré lo debido.» Ellos fueron. Salió de nuevo hacia mediodía y a media tarde e hizo lo mismo. Salió al caer la tarde y encontró a otros, parados, y les dijo: «¿Cómo es que estáis aquí el día entero sin trabajar?» Le respondieron: «Nadie nos ha contratado.» Él les dijo: «Id también vosotros a mi viña.»
 
Cuando oscureció, el dueño de la viña dijo al capataz: «Llama a los jornaleros y págales el jornal, empezando por los últimos y acabando por los primeros.» Vinieron los del atardecer y recibieron un denario cada uno. Cuando llegaron los primeros, pensaban que recibirían más, pero ellos también recibieron un denario cada uno. Entonces se pusieron a protestar contra el amo: «Estos últimos han trabajado sólo una hora, y los has tratado igual que a nosotros, que hemos aguantado el peso del día y el bochorno.» Él replicó a uno de ellos: «Amigo, no te hago ninguna injusticia. ¿No nos ajustamos en un denario? Toma lo tuyo y vete. Quiero darle a este último igual que a ti. ¿Es que no tengo libertad para hacer lo que quiera en mis asuntos? ¿O vas a tener tú envidia porque yo soy bueno?» Así, los últimos serán los primeros y los primeros los últimos.
 
Palabra del Señor.
 

Lectio Divina 2014-09-14: «Tanto amó Dios al mundo…»

DEL EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 3, 13-17
 
En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo:
 
–Nadie ha subido al cielo, sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna. Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen el él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.
 
Palabra del Señor
 

Lectio Divina 2014-09-07: «Ahí donde estéis dos o tres, estaré con vosotros»

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 18, 15-20
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
 
–Si tu hermano peca, repréndelo a solas entre los dos. Si te hace caso, has salvado a tu hermano. Si no te hace caso, llama a otro o a otros dos, para que todo el asunto quede confirmado por boca de dos o tres testigos. Si no les hace caso, díselo a la comunidad, y si no hace caso ni siquiera a la comunidad, considéralo como un gentil o un publicano. Os aseguro que todo lo que atéis en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en el cielo. Os aseguro, además, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre del cielo. Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.
 
Palabra del Señor.
 

Lectio Divina 2014-08-24: «Y vosotros, ¿quién decís que soy?»

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 16, 13- 20
 
En aquel tiempo, llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo y preguntaba a sus discípulos: — ¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? Ellos contestaron: — Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas. Él les preguntó: — Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Simón Pedro tomó la palabra y dijo: — Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo. Jesús le respondió: — ¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo. Y les mandó a los discípulos que no dijesen a nadie que Él era el Mesías.
 
Palabra del Señor
 
 
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