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Lectio Divina 2013-11-17: La piedra que los constructores desecharon

Las palabras de Jesús anuncian un orden nuevo. Podrían interpretarse y aplicarse a cualquier momento de la historia: ¿ha tenido la humanidad algún momento en que no hubiera guerras, revoluciones o inestabilidad política o social? Pero aunque los tiempos que seguirán a la muerte de Jesús, especialmente la guerra contra los ocupantes romanos y la destrucción del Templo y la ciudad santa, sean peligrosos y sobrecogedores, ese no será el fin. En cierto sentido, para los cristianos seguidores del “nuevo camino” proclamado por Jesús, su actitud siempre se enfrentará a los poderes de este mundo, y esa lucha será una guerra constante a lo largo de la historia.

Amigos y compañeros en el Señor

Viviendo dispersamente, sin compañía, Dios confía en la persona fomentando el discernimiento personal. Siguiendo a Dios pobre y humilde. Sin lugar para reclinar la cabeza, ofreciendo servicios de balde, sin llamar la atención material. Nos hacemos amigos y compañeros en el Señor.

Ayuda al Papa a saber qué piensan los fieles sobre los problemas de las familias

 
¿Quieres ayudar al Papa a saber qué piensan los fieles de todo el mundo ante los problemas de la familia y sus posibles soluciones? Por primera vez en la historia, todos los cristianos pueden expresar su opinión, gracias al cuestionario hecho público por la Santa Sede. Aquí les ofrecemos la posibilidad de hacerlo, de manera segura y eficaz.
 

Creyendo en la persona

Enseñar a vivir y morir bien. Creyendo y confiando en la persona. Guiado por un amor discreto y prudente. Sin grandes reglas, aprendiendo a seguir el criterio del amor. Entre penurias, armado de la confianza en la Providencia y la persona, Dios suple nuestras carencias. Sin buscar lugares ni tareas concretos, Dios nos llama a construir el Reino en cualquier situación y espacio. Mi casa y claustro es el mundo, mi alojo es el hogar de un peregrino.

Aprendiendo a decir que no

Inclinado a hacer cosas por los demás, olvido cuidar de mí mismo, darme tiempo y descanso, un respiro para estar y disfrutar. Sin saber dar un no por respuesta, intento aprender a dar respuestas negativas. Un no dicho con cariño por respeto a mí mismo. Un no argumentado y justificado cuando no sería necesario dar explicaciones. Noes que conforman un gran sí, basado en el cuidado, respeto y cariño hacia uno mismo.

Llamada interna a ser feliz

Contemplando la llamada interna de cada uno a ser feliz, a encontrar su sitio. Cayendo en la cuenta de lo que me llama: personas, acciones y cosas que me llenan de profunda alegría. También situaciones difíciles y duelos, presencia silenciosa junto a personas donde pese a pasarlo mal quiero estar. Mirando cómo Dios mismo se vale de todo eso para llamarnos, para que cada cual encuentre lo que más feliz le hace.

CONFLICTO CON LA DESCONFIANZA

Los cristianos estamos llamados a estar en comunión y comunicación directa con Dios Trino (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y EL esta en comunicación directa con nosotros a través de sus promesas y respuestas a nuestras oraciones, suplicas, confesiones. A veces sin que nos demos cuenta, podemos mostrar interés en cosas mas prosperas: lotería, buenos negocios económicos, preferentes de los bancos, un dinerillo no viene mal y es cuando empezamos a confiar en eso mas que en las promesas de Dios para nosotros. 

Perdón por distorsionar la realidad

Perdón, Señor, por empeñarme en distorsionar la realidad para convencerme de que no soy apreciado ni querido. No es cierto, aunque esa sea mi percepción y (aún peor) mi sentimiento. Contemplar la indiferencia de los demás hacia mí no crea pensamientos ni sentimientos positivos. Sea pues mi acción la contemplación de la no indiferencia de aquellos, la que me haga ver una realidad más precisa. Concédeme, Señor, la desaparición de prejuicios y fantasmas y ver la claridad y el calor del amanecer del sol que me alumbra.