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El tío que conocí

 Hace 31 años conocí a un tío que me cambio la vida (eso que pocas veces sucede). Casi sin querer, ya que había quedado para conocer a otro.

Este tío es medio famosillo (por lo menos en el lado del mundo donde he nacido). Ya había escuchado hablar de él, y varias veces, con esos cotilleos sobre su vida, su infancia, qué habia hecho para ser famoso, la historia de sus amigotes y todo eso.

Pero esa noche yo me había preparado para conocer a otro, menos famosillo aún, llamado Paco. La cosa es que apenas comenzada la cita con Paco, va y se aparece este tío y … ¡ya no tuve ojos para nadie más!¡Qué bueno estaba (y está)!

Parábola del buen hombre y sus dos amigos

El Reino de Dios se parece a un buen hombre que invitó a dos de sus amigos a pasar unos días en una casa que tenía junto a la playa. Uno de ellos era una vieja amistad de hacía años. El otro, unos años más joven, era extranjero y aunque amigo, quizá no tan allegado como aquel. Una noche el amigo allegado y el que era más joven, que compartían habitación, se miraron, se abrazaron, se amaron. Unos días más tarde, el más joven regresó a la casa de residencia de aquel buen hombre a pasar unos días antes de regresar a su país. El amigo más allegado también regresó antes y fue a buscar al más joven en la casa de aquel que les invitó a la playa. Desayunaron y se fueron a dar un paseo. Unas horas más tarde, aquel buen hombre escribió a su amigo más allegado mostrándole su profundo malestar de que sus dos amigos hubieran utilizado su casa para amarse a sus espaldas mientras él seguía aún en la playa.

Patrimonio Espiritual de la Humanidad

Hoy se celebra el día de Ntra. Sra de Fátima.

El ser humano individual tiene la tendencia de considerar su limitación temporal, y sus experiencias personales, como LA VIDA. Pero en realidad, LA VIDA, está constituida con todo aquello que nos precede y todo aquello que nos sobrevivirá.

El ser humano individual, en su ínfima experiencia, es solo un eslabón de un ciclo vital: el ciclo vital de la Humanidad.

En ese sentido, la humanidad ha tenido hitos que cambiaron rumbos.

Concepciones de pensamientos y experiencias espirituales, devenidas de la BÚSQUEDA interior, ha cambiado, creado y cultivado, religiones, espiritualidades y  culturas.

Que todos sean uno

Padre santo, no ruego solamente por ellos, sino también por los que, gracias a su palabra, creerán en mí.

Que todos sean uno: como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste.

Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno
-yo en ellos y tú en mí- para que sean perfectamente uno y el mundo conozca que tú me has enviado, y que yo los amé cómo tú me amaste.

Padre, quiero que los que tú me diste estén conmigo donde yo esté, para que contemplen la gloria que me has dado, porque ya me amabas antes de la creación del mundo.

Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te conocí, y ellos reconocieron que tú me enviaste.

Les di a conocer tu Nombre, y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me amaste esté en ellos, y yo también esté en ellos» (Juan 17, 20-26).

Punto Ciego / Xiringuito

El ojo tiene un punto ciego, cada ojo a un lado simétrico. El ojo es la lámpara del cuerpo, Mateo seis veintidós, San Lucas once treinta y cuatro. El punto ciego es por donde sale el «cableado» del nervio óptico, y ahí no puede haber células detectoras de luz. Acércate a la pantalla, guiña un ojo.

 

 

 

Claro, ya me veis venir…. Tenemos otro punto ciego de La Razón.

 

Lo curioso del punto ciego del ojo es que por ahí no se ve, pero no se nota nada. No es que ahí «veamos» un punto negro. No se ve, pero tampoco se ve que no se vea. Ceguera autorreferencial. Ceguera fractal. Lo mismo que en el intelecto, que no te das cuenta de que no te estás dando cuenta. Venga, acércate otra vez a la pantalla.

 

 

Mi MADRE la está cuidando.

Un día como hoy hace 13 años, moría mi mama Nelly.

Murió el día en que la iglesia católica celebraba el día de Jesús, el Buen Pastor.

Sé que descansa en paz.

Llenando el cielo de flores de papel crepé, haciendo pendientes de semillas de jacarandá, discutiendo con su madre (en silencio), aconsejándole a la Virgen sobre la forma de reformar sus vestidos (pero que guarde los viejos por si algún día los llega a necesitar!) y encaprichándose con que Jesús haga alguna cosa que a ella le parezca lo más apropiado.

Hoy mi recuerdo y mis oraciones!

Mi MADRE la está cuidando!

En esto de perdonar sí

Puede que al principio, cuando el Señor hace estas mercedes, no luego el alma quede con esta fortaleza; más digo que si las continúa a hacer, que en breve tiempo se hace con fortaleza, y ya que no (aunque no) la tenga en otras virtudes, en esto de perdonar sí. No puedo yo creer que alma que tan junto llega de la propia misericordia, adonde conoce la que es y lo mucho que le ha perdonado Dios, deje de perdonar luego con toda facilidad y quede allanada en quedar muy bien con quien la injurió; porque tiene presente el regalo y merced que le ha hecho, adonde vio señales de grande amor y alégrase se le ofrezca en qué le mostrar alguno (Santa Teresa de Jesús, Camino de Perfección 36, 12).

Ilusiones y regalos del demonio

Estos efectos que he dicho a la postre (la humildad de no creerse más por linaje u honra) son de personas ya más llegadas a la perfección y a quien el Señor muy ordinario hace mercedes de llegarle a Sí por contemplación perfecta. Mas lo primero, que es estar determinados a sufrir injurias y sufrirlas aunque sea recibiendo pena, digo que muy en breve lo tiene quien tiene ya esta merced del Señor de tener oración hasta llegar a la unión; y que si no tiene estos efectos y sale muy fuerte de ellos de la oración, crea que no era la merced de Dios, sino alguna ilusión y regalo del demonio, porque nos tengamos por más honrados (Santa Teresa de Jesús, Camino de Perfección 36, 11).

Principio y Fundamento

El fundamento de mi vida es descubrir que aunque no sé con claridad el lugar donde quiero estar mañana, sí sé que quiero estar cerca de mi Señor y que lo que hago hoy me acerca más y más a un encuentro cada vez más cotidiano con Él junto a los que me rodean.

El fundamento de mi vida es constatar que con los años, mi opción de acompañar servir a los demás se hace realidad en decisiones concretas en las que no tengo que pensar si me entrego o no, porque la respuesta por defecto es que sí. Constatar que voy a tener que aprender a vivir siempre con la tensión e incertidumbre de no saber si estoy en mi sitio sino confiar que Dios proveerá.

El fundamento de mi vida es ser poco a poco más consciente de que yo también tengo necesidades, que necesito cariño y descanso, respetarme y hacerme respetar, tener tiempo para estar conmigo mismo, para no hacer nada, para dejar hacer a otros y para vivir con paz que no voy a llegar a todas las personas a las que me gustaría.

Sin dejarse pisotear

De estas personas (las contemplativas) está muy lejos estima suya de nada. Gustan entiendan sus pecados y de decirlos cuando ven que tienen estima de ellos. Así les acaece de su linaje, que ya saben que el reino que no se acaba no han de ganar por aquí. Si gustasen ser de buena casta, es cuando para más servir a Dios fuera menester; cuando no, pésales los tengan por más de lo que son, y sin ninguna pena desengañan, sino con gusto. Es el caso que debe ser a quien Dios hace merced de tener esa humildad y amor grande a Dios, que en cosa que sea servirle más ya se tiene a sí tan olvidado, que aún no puede creer que otros sienten algunas cosas ni lo tienen por injuria (Santa Teresa de Jesús, Camino de Perfección 36, 11).

Que no sea seguir esta nota, motivo de alfombrarnos para dejar que nos pisen o no valorarnos ni reconocer nuestros logros. Que quiero hoy entender que fue escrita para los que ya se creen más que otros y se permiten atropellar a los demás, incluso en nombre de Dios.