Búsqueda avanzada
  • Tipo de contenido

  • Categorías

  • Autor

  • Limpiar filtros

2015-04-16 «Todos somos un poco Tomás»

 

A modo de entrada.

            Todos nosotros somos un poco Tomás, nos cuesta aceptarlo pero en algún sitio de nuestra alma sigue la duda; tampoco es una cuestión de fácil respuesta, han pasado los siglos, tenemos textos traducidos y traducidos, desgastados.

            Pero nuestro corazón sabe, se estremece ante la presencia intuida, como los de Emaús sentimos y sabemos, aunque no lo sepamos decir bien, es lo inefable, sabemos, pero no lo sabemos decir.

            No sabemos decir con las palabras, lo sabemos en el fondo de nuestro corazón, que el Señor vive, que ya no muere mas, lo sabemos porque nos lo dice el Espíritu, lo sabemos y lo sentimos, no necesitamos tocar las llagas, no necesitamos verlas; a la pregunta de Jesus: ¿Quién soy Yo para vosotros…? la lengua no sabe responder, pero el Espíritu nos lo dice: “Tu eres el Hijo de Dios vivo, el Cristo”.

 

Lectio Divina 2015-04-12: ¡Paz a vosotros!

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 20, 19- 31
 
Al anochecer de aquel día, el día primero de la semana, estaban los discípulos en una casa con las puertas cerradas, por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: «–Paz a vosotros.»
 
Y diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió: «–Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo.»
 
Y dicho esto exhaló su aliento sobre ellos y les dijo:» –Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados les quedan perdonados; a quienes se los retengáis les quedan retenidos.»
 
Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían: «–Hemos visto al Señor.» Pero él les contestó: «— Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en el agujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo.»
 
A los ocho días estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo: «–Paz a vosotros.» Luego dijo a Tomás:»–Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.»
 
Contestó Tomás:  «–¡Señor mío y Dios mío!» Jesús le dijo: «–¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que crean sin haber visto.» Muchos otros signos que no están escritos en este libro hizo Jesús a la vista de los discípulos. Estos se han escrito para que creáis que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengáis vida en su Nombre.
 

 

Palabra del Señor

 

Lectio Divina 2015-03-22: La Pasión de Jesús

 
Del Evangelio Según San Marcos
 
Capítulo 14
 
1 Faltaban dos días para la fiesta de la Pascua y de los panes Acimos. Los sumos sacerdotes y los escribas buscaban la manera de arrestar a Jesús con astucia, para darle muerte.
 
2 Porque decían: «No lo hagamos durante la fiesta, para que no se produzca un tumulto en el pueblo».
 
3 Mientras Jesús estaba en Betania, comiendo en casa de Simón el leproso, llegó una mujer con un frasco lleno de un valioso perfume de nardo puro, y rompiendo el frasco, derramó el perfume sobre la cabeza de Jesús.
 
4 Entonces algunos de los que estaban allí se indignaron y comentaban entre sí: «¿Para qué este derroche de perfume?
 
5 Se hubiera podido vender por más de trescientos denarios para repartir el dinero entre los pobres». Y la criticaban.
 
6 Pero Jesús dijo: «Déjenla, ¿por qué la molestan? Ha hecho una buena obra conmigo.
 
 
(Continúa) 
 
 

Lectio Divina 2015-03-15: «El que hace la Verdad se acerca a la luz»

 LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 3, 14- 21
 
En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo:
 
— Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna. Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen en él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él. El que cree en él no será condenado; el que no cree ya está condenado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios. El juicio consiste en esto: que la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron la tiniebla a la luz, porque sus obras eran malas. Pues todo el que obra perversamente detesta la luz y no se acerca a la luz, para no verse acusado por sus obras. En cambio, el que realiza la verdad se acerca a la luz, para que se vea que sus obras están hechas según Dios.
 
Palabra del Señor
 

Lectio Divina 2015-03-08: «Él sabía lo que hay dentro de cada hombre.»

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 2, 13- 25
 
Se acercaba la Pascua de los judíos y Jesús subió a Jerusalén. Y encontró en el templo a los vendedores de bueyes, ovejas y palomas, y a los cambistas sentados; y, haciendo un azote de cordeles, los echó a todos del templo, ovejas y bueyes; y a los cambistas les esparció las monedas y les volcó las mesas; y a los que vendían palomas les dijo: — Quitad esto de aquí: no convirtáis en un mercado la casa de mi Padre. Sus discípulos se acordaron de lo que está escrito: «el celo de tu casa me devora». 
 
Entonces intervinieron los judíos y le preguntaron: — ¿Qué signos nos muestras para obrar así? Jesús contestó: — Destruid este templo, y en tres días lo levantaré. 
 
Los judíos replicaron: — Cuarenta y seis años ha costado construir este templo, ¿y tú lo vas a levantar en tres días? Pero él hablaba del templo de su cuerpo. Y cuando resucitó de entre los muertos, los discípulos se acordaron de lo que había dicho, y dieron fe a la Escritura y a la Palabra que había dicho Jesús. Mientras estaba en Jerusalén por las fiestas de Pascua, muchos creyeron en su nombre, viendo los signos que hacía, pero Jesús no se confiaba con ellos, porque los conocía a todos y no necesitaba el testimonio de nadie sobre un hombre, porque él sabía lo que hay dentro de cada hombre.
 
Palabra del Señor
 

Lectio Divina 2015-02-29: «Es mi Hijo, ¡escuchadle!»

DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 9, 2, 10
 
En aquel tiempo, Jesús se llevó a Pedro, a Santiago y a Juan, subió con ellos solos a una montaña alta, y se transfiguró delante de ellos. Sus vestidos se volvieron de un blanco deslumbrador, como no puede dejarlos ningún batanero del mundo. Se les apreció Elías y Moisés conversando con Jesús. Entonces Pedro tomó la palabra y le dijo a Jesús: — Maestro. ¡Qué bien se está aquí!

Lectio Divina 2015-02-22: «¡Creed en el Evangelio!»

LECTURA DEL EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 1, 12- 15
 
En aquel tiempo el Espíritu empujó a Jesús al desierto. Se quedó en el desierto cuarenta días, dejándose tentar por Satanás, vivía entre alimañas y los ángeles le servían. Cuando arrestaron a Juan, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios. Decía:
 
— Se ha cumplido el plazo, está cerca el reino de Dios: convertíos y creer en el Evangelio.
 
Palabra del Señor

 

Lectio Divina 2015-02-15: «Quiero. ¡Queda limpio!»

 LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 1, 40-45
 
En aquel tiempo se acercó a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas:
 
— Si quieres, puedes limpiarme.
 
Sintiendo lástima, extendió la mano y lo tocó diciendo:
 
— Quiero: queda limpio
 
La lepra se le quitó inmediatamente y quedó limpio. Él le despidió encargándole severamente:
 
— No se lo digas a nadie; pero para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés.
 
Pero cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes ponderaciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo; se quedaba fuera, en descampado; y aún así acudían a él de todas partes.
 
Palabra del Señor
 

2015-01-22: ESPECIAL: ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LAS IGLESIAS

“ Misericordia quiero y no sacrificios”     

                  

A pesar de que no soy, ni mucho menos una experta, siempre me ha parecido que la división entre las distintas confesiones cristianas, se ha producido históricamente, a veces por luchas de poder o problemas puramente políticos y se ha perpetuado en el tiempo, fundamentalmente por discrepancias teológicas y dogmáticas, que poco tienen que ver con la vida de la gente y por consiguiente con el seguimiento de Cristo.

 

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad