2016-08-04“ Pero Tú Señor has puesto en mi corazón más alegría que si abundara en trigo y en vino”.
O R A C I Ó N C R I S M H O M 4 – A G O S T O – 2 0 1 6
Qué alegres y dichosos deben sentirse, Señor,
quienes, al considerar su propio yo,
no descubren en sí mismos nada digno de mención.
No sólo no atraen la atención de los demás,
sino que tampoco tienen deseo ni interés egoísta alguno
en atraer la atención de sí mismos.