
El acompañamiento es una cuestión de dos partes. Ambas deben completamente sentirse libres para interrumpir el proceso en cualquier momento cuando se den situaciones que no sean propias del acompañamiento. Si alguna de ambas partes detecta situaciones reiteradas como las que siguen, estaría justificada la interrupción:
- Considerarnos dueños de la vida de la otra persona.
- No es un encuentro de amistad.
- No es agradar sino ayudar a la otra persona.
- No es tener respuesta para todo.
- No es tomar decisiones por la otra persona.
- No es crear dependencias de cualquier tipo.
- No es una terapia psicológica, ni una receta de soluciones.
Si quieres enterarte con más profundidad lo que entendemos por acompañamiento espiritual, puedes escuchar la siguiente CHARLA.
En este contexto es deseo de CRISMHOM fomentar y animar que tanto los socios comprometidos como simpatizantes así como personas que no conozcan CRISMHOM y lo deseen, puedan solicitar acompañamiento espiritual puntual o periódico tanto en CRISMHOM a través de sacerdotes o personas laicas formadas que se ofrezcan para ello. La periodicidad tendría que ser elegida de mutuo acuerdo entre ambas partes. Para solicitar este servicio puedes ponerte en contacto con la siguiente dirección de correo acompanantes@crismhom.org.