El Señor cuida de mí

La mirada de ternura de Dios en nuestra vida, nos envuelve en su aceptación incondicional: “Vio Dios todo lo que había hecho, y era muy bueno” (Gn1,31). Volver a esta mirada sobre mi vida, a esa mirada de amor que cuando descubrimos nos llena de alegría y seguridad porque sabemos experiencialmente que: “El Señor cuida de mi” (Sl 39). Esto hace brotar en nosotros la alegría porque como dice el Papa Francisco: tengo, tenemos la seguridad de que Jesús está con nosotros y con el Padre. Él me acompaña en el camino de la vida.

Vana búsqueda de respeto

A veces acumulamos y cultivamos las cosas que hacen que los demás nos aborrezcan, pensando que eso es precisamente lo que nos va a hacer ganar respeto ante ellos. Acumulamos riquezas, méritos y honores para que nos respeten, y eso sólo logra separarnos más y más en lugar de crear puentes de unión. Cuando Jesús se acerca a nosotros, no reprocha. Es buen ejercicio contemplar las veces en las que Jesús se acerca a nosotros y nos trata como al buen samaritano. Vendando nuestras heridas, subiéndonos a su cabalgadura, cuidando de nosotros en una posada.

Sobre la justificación por la fe

La tesis de la justificación por la fe de Lutero de que la salvación se alcanza por la fe sin necesidad de hacer buenas obras surge de una unión y conocimiento muy hondos de Dios en una época donde la salvación se compraba y vendía con bulas. La inspiración de Lutero fue la de percibir el amor gratuito y unilateral de Dios más allá de la respuesta humana. Relativizar el valor de la salvación, poniendo como fin no a esta, sino la experiencia vital de unión, amistad y amor a Dios, de la que fluyen espontaneamente obras de amor compartido, porque se recibió previamente del amor íntimo de Dios, igualmente atisbado a través del amor de los demás. Porque si Dios está con nosotros, quien podrá estar en contra. Y si el fiscal de los elegidos de Dios es Jesús, el que perdona, el que dio su vida por nosotros. ¿Cómo no nos regalará la salvación? (Romanos 8)

2015-01-18 Violencia contra los cristianos de Zinder (Níger)

Tomado de Acoger y Compartir: Hoy sábado 17 de enero 2015, hemos recibido noticias muy preocupantes desde Zínder, una ciudad en el sudeste de Níger, no lejos de Nigeria, en la que viven la misionera española Dolores (Religiosas de la Asunción) y la hermana Hortensia, con las que Acoger y Compartir lleva años colaborando. A través de Dolores, hemos sabido que manifestantes islamistas han quemado varias iglesias, el colegio católico, el coche de las hermanas,… Dolores y Hortensia se encuentran bien, refugiadas junto a otros cristianos en el hospital.

Los mejores matrimonios

Los mejores matrimonios son aquellos que eligen lo siguiente:

Tener un deseo e intención en lugar de dispersarse y dejarse llevar.

Estar comprometido en todos los casos en lugar de hacerlo sólo mientras la música acompañe.

Ser comunitario en lugar de solitario.

Being intentional rather than drifting.

Being committed no-matter-what, rather than committed as-long-as.

Being communal rather than solitary.

«Take back your marriage», William J. Doherty

¿Puede marcar tanto un encuentro?

A nosotros nos ha llegado la fe en Jesús gracias a la experiencia de aquellos primeros discípulos que se encontraron personalmente con Jesús y sus vidas fueron transformadas.

Desde el punto de vista psicológico, la pregunta es: ¿Puede un encuentro o algunos encuentros marcar tanto a alguien que le lleven a ensanchar inesperadamente sus ideas a cerca de su vida, de lo que puede saber y hacer? La respuesta es afirmativa. Todo el mundo comienza su vida marcado y troquelado por unas relaciones fundantes de la idea que va a tener de sí y del mundo.

Capacidad de asombro y sorpresa

Mucho ánimo y cuidemos de nosotros mismos. Abrámonos a la capacidad de asombro y sorpresa. Permitámonos no sentirnos que estamos ya de vuelta de todo, de saberlo todo, sino que volvamos a la inocencia de un niño, para el que todo es nuevo, sorprendente y asombroso.

Lo que más os despertare amar, eso haced

Teresa creció en el camino espiritual del encuentro con Dios a través de la dirección espiritual. Recibió un mensaje místico: «No quiero que converses con los hombres sino con los ángeles». Teresa ve con claridad no sublimar los deseos, sino levantar el espíritu de lo creado. Teresa evita las ocasiones, situaciones que nos separan del amor de Dios y tener tiempos de soledad y silencio para que Dios actúe. Teresa tenía que forzarse en empeño por rezar, concentrar la mente, cosa que ella no podía. «No os pido más que le miréis», se decía Teresa porque no podía rezar. En las moradas, cosecha el amor al prójimo. «Lo que más os despertare amar, eso haced». Teresa experimenta que Dios ocultaba y escondía sus pecados. No había forma de despedirse de ella por la suavidad de su conversación. Teresa tuvo una salud quebrada que enfrentó con una sonrisa día tras día sin perder su humor ni jovialidad, llena de sentido común, fomentando crecimiento en virtudes que no en rigor.

Santa Teresa y la humanidad de Cristo

El Concilio de Trento iniste en el examen cotidiano de la conciencia, en la confesión, en la potenciación de la vida de oración y la ejemplaridad de la vida religiosa. Teresa de Jesús vive en el espíritu de Trento. Se apuesta por una experiencia individual del encuentro con Dios (muy característico de la modernidad). A Teresa de Jesús le conmueve la humanidad de Jesús y para ella es el camino para llegar a Dios. Teresa es una mujer recia y práctica, sabe encontrar a Dios entre los pucheros, sabe cocinar, vive en el mundo. Esta casa (el primer convento que fundó) era el rinconcito, el paraíso de Dios. La experiencia con Jesús es alegría con Cristo y tristeza con Cristo camino del huerto. ¿Es que acaso se puede evitar las vivencias con Cristo camino del huerto? Uno de sus confesores le dio el consejo a Teresa de centrase cada mañana en un paso de la pasión, deleitándose en la sacratísima humanidad de Cristo, que así se nos revela.

2015-01-12 Programa de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos

Esta página contiene el programa de actos con motivo de la Semana de Oración de la Unidad de los Cristianos de 2015. Desde CRISMHOM, que es una comunidad ecuménica, invitamos a todos los que leáis esta página a que de forma espontanea participéis en alguno de estos actos. Estos actos tienen lugar cada día en distintos templos adscritos a distintas confesiones y denominaciones cristianas.

Viaje, sol abrasador, cansancio, sed … «Dame de beber». Este es el deseo de todo ser humano. Dios, que se hace hombre en Cristo (Juan 1, 14) y se vacía a sí mismo para compartir nuestra humanidad (Filipenses 2, 6-7), es capaz de decirle a la mujer samaritana: «Dame de beber» (Juan 4, 7). Al mismo tiempo, este Dios que sale a nuestro encuentro nos ofrece el agua viva: «el que beba del agua que yo quiero darle, nunca más volverá a tener sed sino que esa agua se convertirá en su interior en un manantial capaz de dar vida eterna» (Juan 4, 14). Consejo Nacional de Iglesias Cristianas de Brasil (CONIC)