Santo/as Inocentes
Mucho/as son los santos inocentes que al día de hoy siguen muriendo.
Mucho/as son los santos inocentes que al día de hoy siguen muriendo.
Un año más y una noche más me ha acompañado este vídeo. La conmemoración del nacimiento de este niño me ha llenado de ternura pero es al HOMBRE en que se convirtió al que amo, admiro, respeto y reverencio. GLORIA IN EXCELSIS DEO
Por estos lares ya se celebra el nacimiento de un hermoso niño/hombre/Dios que cambió el mundo de occidente y muchas vidas (entre ellas la mía).
Hace décadas que mi primera celebración en este día está dedicada al vientre que parió a ese niño/hombre/Dios: María de Nazaret.
Alégrate María… Llena eres de Gracia… El Señor está contigo… Bendita tú eres entre todas las mujeres y Bendito el fruto de tu vientre…
Gracias a ti mi corazón está encendido.
Hoy será la noche más larga del año. Una noche que se llena de LUZ por la esperanza de AQUEL que estamos esperando. Una noche para bendecir.
Hoy bendigo cada viaje realizado en mi vida. Tanto a las alturas como a las profundidades. Tanto al este como al oeste de mi Ser.
Hoy bendigo a cada una de esas personas que me he encontrado en estos viajes y, por sobre todas las cosas… ¡hoy bendigo a Aquel que nos bendice!
«Bendigo la luna porque fue testigo,
Bendigo el silencio que fue nuestro abrigo
Bendigo el momento de haber decidido… la vida es toda para mí.
El día de ayer se ha celebrado a Nuestra Señora de Guadalupe que ostenta los títulos de Patrona, Emperatriz y Madre de las Américas.
Su imagen es la que me ha acompañado desde hace 33 años. La conocí en mi primera visita al monasterio de clausura donde años más tarde ingrese. La venere desde ese momento y conocí la Salve cantada que se ha convertido en mi oración predilecta. Su imagen, junto a un Jesús pintado por una ex novia, me acompañan constantemente entronizados siempre allí donde pueda verlos y hablarles (ahora mismo se encuentran frente a mi escritorio y cada vez que trabajo puedo levantar la vista, mirarlos y llenarme de ternura).
Esta semana no solo ha comenzado el adviento sino que en la tradición judía se celebran ocho días de luz: Hanukkah.
Se celebran la libertad de los griegos y el retorno de su identidad social y religiosa.
No difiere mucho del adviento que celebramos los cristianxs catolicxs en estos días. También celebramos con luces la venida de aquel que nos traerá la libertad y una identidad religiosa.
«El cambio es un proceso, y uno que requiere de mucha resistencia.
Ver lo que necesitamos cambiar es la primera parte de ese proceso.
La segunda parte es comprometernos con ese cambio.
Es durante este tiempo que recibimos un estímulo de energía inicial. Nos sentimos con la facultad, vemos todo lo que somos capaces de hacer y nos sentimos en la cima del mundo.
La tercera parte del proceso es: La gran prueba. Y desafortunadamente es aquí donde la mayoría de nosotros se rinde.
¡LA VIDA se las trae constantemente!
¿Alguien puede decir que, si estamos abiertos, no nos sorprende a todo momento?
Pues no perdamos la capacidad de asombro ni la apertura.
Ser «viviente practicante” llena de colores y consume el alma.
Ser «luz y faro» cada día es el pago apropiado por el aire que se consume, la vida que se nos ha dado y los regalos divinos recibidos.
Vive, Respira, Sirve, Recibe y Da.
¡Consúmete en todos tus colores verdaderos!
Que nuestro EGO no impida que tengamos la humildad de aprender de otros, de ser nutridos por algunos que han recorrido ciertos caminos antes que nosotros. No busquemos soluciones fáciles.
Tenemos que comprometernos con nuestra vida, rodearnos de personas que nos aporten energía positiva, conocimientos, valores y nos animen a desarrollar nuestro valioso potencial. Dejemos de lado las personas tóxicas que nos tiran abajo por sus propias inseguridades.