Todos los seres humanos tenemos personas preferidas en la vida. Yo no soy la excepción. La diferencia es que estas tres personas son mis preferidas, favoritas, especiales, inigualadas, etc, etc, etc.
Similares entre si y al mismo tiempo, únicas e inconfundibles.
Mucho se ha escrito de ellos pero mucha gente lo hizo sin conocerles.
Por ejemplo:
– Les aseguro que el PADRE no tiene barba y para nada es un anciano (con esa energía constante y creadora que tiene! Toda una Presencia!).
– El ESPÍRITU SANTO no es ningún pájaro sino que es la creación toda al mismo tiempo y, por último,
– el HIJO no es tan Divino como lo presentan: tiene también una humanidad encarnada que arrolla, ejemplifica y ama.
Conocerlos en espíritu y verdad, es madurar, comprender y asumir las verdades y las mentiras.
Pero hay que recordar que María es la Gran Amada por estos tres y todo ese amor se vuelca hacia nosotr@s como Hij@s y Herman@s.
Qué gran regalo el conocer estos misterios!
Pero, aun así, si conociéramos lo único importante (Cuanto nos Aman) nuestra vida sería más sencilla.