2019-03-28: “Si no os hacéis como niños no entraréis en el Reino de Dios”

Estamos en el centro de la Cuaresma. Muchas veces se ha hablado de este tiempo como un tiempo de conversión, entendiendo ésta como un proponerse y actuar. Pero si lo que Jesús quiere es que nos hagamos como niños, entonces no podemos proponernos nada. El asunto está en colocarse ante Dios y dejarse hacer. Eso es más dificil de lo que parece porque choca radicalmente con nuestro ego. En esta tarde de jueves, vamos a colocar en el centro de nuestra meditación este verdadero camino de conversión que es la infancia espiritual.
 
CANTO: ¿Qué te puedo dar?
¿Qué te puedo dar,
Qué no me hayas dado Tú?
¿Qué te puedo decir,
Qué no me hayas dicho Tú?
¿Qué puedo hacer por Ti,
Si yo no puedo hacer nada,
Si yo no puedo hacer nada
Si no es por Ti, mi Dios?
 
Todo lo que sé, todo lo que soy,
Todo lo que tengo es tuyo (bis)
 
SALMO 131 (todos)
Señor, mi corazón no es ambicioso ni mis ojos altaneros:
No pretendo grandezas que superan mi capacidad,
Sino que acallo y modero mis deseos
Como un niño en brazos de su madre
Como un niño está en mis brazos mi deseo.
Espere Israel en el Señor ahora y por siempre.
 
LECTURA:
Sí, hacerse pequeños, más pequeños todavía, lo más pequeños posible, es el secreto de la vida mística. Y cuando uno ha llegado a reducirse a un punto, sin otra consistencia de la del alma que contempla o la del corazón que ama, debe acostumbrarse a echar por tierra la  propia seguridad, la seguridad eterna del orgullo, la seguridad difícil del “yo” que se cree siempre centro del universo.
Recordemos aquí algo muy importante: orar no significa solo hablar, sino escuchar; contemplar no significa mirar, sino ser mirado. Cuando caemos en la cuenta de esto, entramos por fin en la esfera de la verdad, y la oración comienza a ser vivida.
Ser mirados por Dios: así definiría yo la contemplación, que es más pasiva que activa, más silencio que palabra, más espera que acción.
¿Qué soy yo ante Dios?¿ Qué puedo hacer para lograr que se me revele?
Si Él cierra no hay quien abra ( Apocalipsis), y si Él abre no hay quien cierre.
Es Dios el elemento activo del amor, el primero, el que hace dentro de mí su oración, que se convierte en oración mía
Ser como niños en el seno de Dios significa paz en la tormenta, seguridad ante las pruebas de la vida, luz en las tinieblas, esperanza en la muerte. Lo que cuenta es dejarse hacer, vivir de la fe, confiar en el Dios eterno. Y sobre todo, comprender una cosa, que nuestro desarrollo espiritual depende de leyes ajenas a nosotros, y de una voluntad que nos trasciende.
 
¿Qué puede hacer un niño en el seno de su madre? Esperar, tener paciencia, estar tranquilo.                                                                  Carlo Carretto ( Más alla de las cosas)
 
Todos
Señor, mi corazón no es ambicioso ni mis ojos altaneros:
no pretendo grandezas que superan mi capacidad,
sino que acallo y modero mis deseos
como un niño en brazos de su madre
como un niño está en mis brazos mi deseo.
Espere Israel en el Señor ahora y por siempre.
 
CANTO: ¿Por qué tengo miedo?
Por qué tengo miedo si nada es imposible para Ti.
Por qué tengo miedo si nada es imposible para Ti.
Por qué tengo miedo si nada es imposible para Ti.
Por qué tengo miedo si nada es imposible para Ti.
 
-Por qué tengo dudas
 
-Enséñame a orar
 
LECTURA:
A Teresa se le viene continuamente a la boca y a la pluma la expresión  “ser pequeña”. Esto le sucederá también más tarde. Sin embargo es preciso constatar un notable desplazamiento de significado. En los primeros años, la pequeñez es sinónimo, sobre todo, de humildad, al servicio del amor a Dios. Más tarde, simbolizada ella misma en la figura de un niño, extenderá el significado de la expresión mucho más allá de la humildad, la cual, por lo demás permanecerá siempre como un elemento base. La pequeñez entonces se convertirá en una “ esperanza llena de confianza”, como la que tiene el niño frente a su padre: la pequeñez no está ya pues al servicio de nuestro propio amor a Dios, del que nosotros queremos darle a Dios, sino del amor misericordioso que Dios nos tiene, del que recibimos de él.                                                                  Sobre Teresa de Lisieux
 
Todos
Señor, mi corazón no es ambicioso ni mis ojos altaneros:
no pretendo grandezas que superan mi capacidad,
sino que acallo y modero mis deseos
como un niño en brazos de su madre
como un niño está en mis brazos mi deseo.
Espere Israel en el Señor ahora y por siempre.
CANTO: Señor, enséñame a orar
Señor, enséñame a orar,
quita de mi mente los esquemas del mundo ( bis)
Haz que me encuentre contigo
y sea lo que  quieres de mí.
Quiero encontrarme contigo
Y ser lo que quieres  de mí.
 
Señor…
LECTURA: Juan 3, 1-8
 Un fariseo llamado Nicodemo, hombre importante entre los judíos, fue de noche a visitar a Jesús. Le dijo:
–Maestro, sabemos que has venido de parte de Dios a enseñarnos, porque nadie puede hacer los milagros que tú haces si Dios no está con él.
 Jesús le dijo:
–Te aseguro que el que no nace de nuevoa no puede ver el reino de Dios.b
 Nicodemo le preguntó:
–Pero ¿cómo puede nacer un hombre que ya es viejo? ¿Acaso puede entrar otra vez dentro de su madre para volver a nacer?c
 Jesús le contestó:
–Te aseguro que el que no nace del agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios.  Lo que nace de padres humanos es humano; lo que nace del Espíritu es espíritu.  No te extrañes si te digo: ‘Tenéis que nacer de nuevo.’  El viento sopla donde quiere y, aunque oyes su sonido, no sabes de dónde viene ni a dónde va. Así son todos los que nacen del Espíritu. 
 
SILENCIO…  (Música de André Jolivet:  La Virgen y el Niño).
 
BREVE ESPACIO  PARA COMPARTIR.
 
PADRE NUESTRO
 
ORACIÓN COMUNITARIA: Señor Jesucristo: imploramos tu protección e intercesión ante el Padre por toda la comunidad LGTBI, por todas aquellas personas que no se aceptan a sí mismas, que sufren en soledad, son perseguidas por su orientación sexual o su identidad de género y que no son comprendidas, ni aceptadas en su entorno más cercano.
También te damos gracias y te pedimos por Crismhom, para que juntos construyamos tu Reino y seamos luz y faro en nuestra comunidad LGTBI de Madrid. Amén.
 
BENDICIÓN: El Señor nos bendiga y nos guarde, nos muestre su rostro y tenga misericordia de nosotros, vuelva su rostro a nosotros y nos conceda la paz. El Señor nos bendiga, hermanas y hermanos. Amén.
 
CANTO:
En mi debilidad, me haces fuerte (bis)
Solo en tu amor me haces fuerte,
Solo en tu vida me haces fuerte,
En mi debilidad, te haces fuerte en mí.

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