2016-02-11 Todos los que tocaban el borde de su manto quedaban sanos.

Gracias porque has elegido lo pequeño, lo sencillo, lo humilde, lo marginado, lo último para manifestarte, para darte a conocer: un niño recién nacido, una cueva, un pesebre, unos padres que no tuvieron sitio en la posada, pastores y pastoras, gente corriente.

Gracias porque nos haces hijas e hijos tuyos en nuestra diversidad. Gracias Señor porque nos hiciste diferentes y a la vez complementarios en la inmensa obra de tu creación, aportando color y alegría. Gracias por darnos el arco iris que simboliza tu promesa de redención para toda la humanidad.

Todos los que tocaban el borde de su manto quedaban sanos.

 

Canción

ALREDEDOR DE TU MESA VENIMOS A RECORDAR
ALREDEDOR DE TU MESA VENIMOS A RECORDAR
QUE TU PALABRA ES CAMINO, TU CUERPO FRATERNIDAD
QUE TU PALABRA ES CAMINO, TU CUERPO FRATERNIDAD

 

Gracias porque has elegido lo pequeño, lo sencillo, lo humilde, lo marginado, lo último para manifestarte, para darte a conocer: un niño recién nacido, una cueva, un pesebre, unos padres que no tuvieron sitio en la posada, pastores y pastoras, gente corriente.

Gracias porque nos haces hijas e hijos tuyos en nuestra diversidad. Gracias Señor porque nos hiciste diferentes y a la vez complementarios en la inmensa obra de tu creación, aportando color y alegría. Gracias por darnos el arco iris que simboliza tu promesa de redención para toda la humanidad.

Gracias, Señor, porque en Ti no hay límites, siempre nos sorprendes. Lo importante es no tener miedo, es fiarse de tus mensajes, saber que has nacido, saber que te tenemos cerca y que te encontraremos en los brazos de tu madre, envuelto en pañales.

Antífona

1. Ven Espíritu Santo,
ilumina mi corazón,
para ver las cosas que son de Dios.

2. Ven, Espíritu Santo,
dentro de mi mente,
para conocer las cosas que son de Dios.

3. Ven Espíritu Santo,
dentro de mi alma,
que yo le pertenezco solamente a Dios.

4. Santifica todo lo que yo piense, diga y haga,
para que todo sea
para la gloria de Dios.
Amén.

Primera lectura: Evangelio según San Marcos 6,53-56
Después de atravesar el lago, llegaron a Genesaret y atracaron allí.
Apenas desembarcaron, la gente reconoció en seguida a Jesús,
y comenzaron a recorrer toda la región para llevar en camilla a los enfermos, hasta el lugar donde sabían que él estaba. En todas partes donde entraba, pueblos, ciudades y poblados, ponían a los enfermos en las plazas y le rogaban que los dejara tocar tan sólo los flecos de su manto, y los que lo tocaban quedaban curados.
Palabra del Señor

Reflexión
¡Oh verdadero Dios y Señor mío! Gran consuelo es para el alma que le fatiga la soledad de estar ausente de Vos, ver que estáis en todos cabos. Mas cuando la reciedumbre del amor y los grandes ímpetus de esta pena crece, ¿qué aprovecha, Dios mío?, que se turba el entendimiento y se esconde la razón para conocer esta verdad, de manera que no puede entender ni conocer. Sólo se conoce estar apartada de Vos, y ningún remedio admite; porque el corazón que mucho ama no admite consejo ni consuelo, sino del mismo que le llagó; porque de ahí espera que ha de ser remediada su pena.
Cuando Vos queréis, Señor, presto sanáis la herida que habéis dado; antes no hay que esperar salud ni gozo, sino el que se saca de padecer tan bien empleado.

¡Oh verdadero Amador, con cuánta piedad, con cuánta suavidad, con cuánto deleite, con cuánto regalo y con qué grandísimas muestras de amor curáis estas llagas, que con las saetas del mismo amor habéis hecho! ¡Oh Dios mío y descanso de todas las penas, qué desatinada estoy! ¿Cómo podía haber medios humanos que curasen los que ha enfermado el fuego divino? ¿Quién ha de saber hasta dónde llega esta herida, ni de qué procedió, ni cómo se puede aplacar tan penoso y deleitoso tormento?… Con cuánta razón dice la Esposa en los «Cantares»: Mi amado a mí, y yo a mi, porque semejante amor no es posible comenzarse de cosa tan baja como el mío. Pues si es bajo, Esposo mío, ¿cómo no para en cosa criada hasta llegar a su Criador?
(Santa Teresa. Exclamación 16)

2 minutos de silencio.

Canción
DIOS ESTÁ AQUÍ
TAN CIERTO COMO EL AIRE QUE RESPIRO
TAN CIERTO COMO LA MAÑANA SE LEVANTA
TAN CIERTO COMO QUE ESTE CANTO LO PUEDES OIR

Lo puedes sentir moviéndose entre las butacas
Lo puedes oír cantando con nosotros aquí
Lo puedes gritar cuando por esa puerta salgas
Lo puedes guardar para siempre en tu corazón

DIOS ESTÁ AQUÍ
TAN CIERTO COMO EL AIRE QUE RESPIRO
TAN CIERTO COMO LA MAÑANA SE LEVANTA
TAN CIERTO COMO QUE ESTE CANTO LO PUEDES OIR

Segunda lectura: Lucas 9,22-25
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
-«El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día». Entonces decía a todos: -«Si alguno quiere venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, tome su cruz cada día y me siga. Pues el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará. ¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero si se pierde o se arruina a sí mismo?».

Palabra del Señor.

Reflexión
Cuando Jesús llamó a los primeros discípulos, la llamada era personalizada y en imperativo: «Veníos detrás de mí», tal y como nos dice Marcos en el capítulo 1 versículo 17. Ahora la invitación se lanza a cualquier auditorio y corresponde a quien escucha aceptarla o no y decidir personalmente si esas palabras le conciernen. Seguir a Jesús supone un deseo sincero y dos condiciones: «que renuncie a sí mismo/a, que cargue con su cruz». Por eso, quien se decida a ello deberá preguntarse acerca de su disposición de aceptar esas condiciones puestas por el mismo Jesús. (Comentario de Dolores Aleixandre sobre este Evangelio).

10 minutos de silencio.     Peticiones y acción de gracias.

Oración
Padre, Madre
En tus manos me pongo
Haz de mí lo que quieras
Por todo lo que hagas de mí te doy gracias.
Estoy dispuesto/a a todo, lo acepto todo,
Con tal de que tu voluntad se haga en mí
Pongo mi alma entre  tus manos,
Te la doy, Dios mío,
Con todo el ardor de mi corazón,
Porque te amo
Y es para mí una necesidad de amor el darme,
el entregarme entre tus manos sin medida,
con infinita confianza
porque Tú eres mi Padre y mi Madre
que nos cuida y nos protege
y vela por nuestro bienestar.
Haces que cargar nuestra cruz sea más llevadero
porque llenas nuestro corazón con el color del arco iris.
Escuchamos tu envío y nos ponemos en camino
para la consecución de tu Evangelio.

Padrenuestro

Oración final
Señor Jesucristo, te pedimos tu protección e intercesión ante el Padre por toda la comunidad LGTB, por todos aquellos hermanos que sufren en la soledad, que se sienten solos, que son perseguidos, que no son aceptados en su entorno más cercano. Y te damos gracias y pedimos por CRISMHOM, para que construyamos Reino y seamos luz y faro de nuestra comunidad LGTB de Madrid.

 

Canción
Tú has venido a la orilla,
no has buscado ni a sabios ni a ricos.
Tan sólo quieres que yo te siga.

Señor, me has mirado a los ojos,
sonriendo has dicho mi nombre.
En la arena he dejado mi barca:
junto a Ti buscaré otro mar.

Tú sabes bien lo que tengo,
en mi barca no hay oro ni espadas,
tan sólo redes y mi trabajo.

Señor, me has mirado a los ojos,
sonriendo has dicho mi nombre.
En la arena he dejado mi barca:
junto a Ti buscaré otro mar.

Bendición
Que el Señor nos bendiga y nos proteja. Que el Señor nos muestre su rostro, tenga misericordia de nosotros y nos conceda la paz. Así invocaremos el nombre del Señor y ÉL nos bendecirá.
 


Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad