Día de todos los Santos y día de difundos. Santos y difuntos se unen. Santos podemos ser todos, Dios nos llama a todos a ser santos porque podemos serlo. Amar y dejarse amar. Cuidar y dejarse cuidar. Ser santo es ser humano y por tanto limitado. Es acertar a poner el amor por delante en el lugar de cada uno, dejarse hacer por Dios. Somos seres únicos con una misión. Nuestros difuntos queridos nos acompañan en todo momento. No nos olvidamos de ellos porque su amor no se puede olvidar.