Sin saber acertar a tener más interacción en las preocupaciones del día a día con algunos de mis amigos. Viendo cómo perciben un progresivo alejamiento que aunque no es querido por mí, no acierto a saber evitarlo. Iniciativas incompatibles de mis amigos para compartir se combinan con propuestas fallidas mías. Estirar el tiempo no es suficiente. Tiene que sobrar, para que la presencia no sea presencia ausente sino que se concentre en estar sin más propósito. Buscando y encontrando gestos para compartir, gestos eficaces que muestran interés y cariño, gestos valorados y agradecidos. Hoy quiero compartir contigo, aunque quizá mañana no acertemos más que a hacer y pensar cada uno en lo suyo, siendo nuestra misión en lo más hondo una misión compartida.