Mis planes no son vuestros planes. Mis caminos no son vuestros caminos, dice nuestro Señor. Recordando una vez más que las cosas no van a ocurrir según mis planes, porque los planes del de Arriba van mucho más allá que los míos. Sea entonces Tu voluntad y confirma que así sea. Entretanto, concédeme paciencia y alegría para irla siguiendo.