Al terminar el año surge hacer balance, intentar recordar con qué nos quedamos y caer en la cuenta de que muchos de nuestros problemas y tragedias ni siquiera las recordamos. Momento para recordar a las personas que acompañamos y las que nos acompañaron, a las nuevas que conocimos, a las de siempre, a las que retomamos y a las que nos dejaron pero siempre estarán ahí. Fin de año para echar una mirada agradecida por todo lo bueno recibido y los desvelos que nos hicieron crecer y aprender. Año Nuevo para perdonar y pedir perdón, a otros y a nosotros, para cuidar y cuidarse, para ser más y hacer menos, para soltar lastre, para facilitar que nuestras relaciones fluyan, para construir la paz. Que 2018 esté lleno de salud, trabajo y felicidad para todos y paciencia y buen ánimo si nos faltan. ¡¡¡Feliz Año Nuevo!!!