
Bienvenides/as/os a este VII Domingo de Pascua y celebración de la Festividad de la Ascensión.
Solo el amor de Dios tan loco y arrebatador es capaz de realizar el prodigio de la Ascensión de Jesús ante la mirada incrédula y desconcertada de los que lo vieron elevarse y que solo un creyente puede más que ver, contemplar.
Ahora quedamos nosotras, nosotros y nosotres como PRESENCIA DEL RESUCITADO.
Estáis invitados/as/es a compartir este espacio tan especial para los creyentes católicos como es la EUCARISTÍA. Un espacio de diversidad, de encuentro, de AMOR.
Nos vemos a las 20:30 como todo último sábado de mes en la Parroquia de San Ignacio de Loyola.