La actividad creativa puede ser artística, literaria, científica o, lo que es más importante, simplemente cotidiana, si se desarrolla en el abordaje novedoso y poco habitual de los retos de la vida diaria. Esta creatividad cotidiana probablemente no dejará huella en la historia de la humanidad, pero es en esencia lo que hace que la vida merezca la pena (Csickzentmihayi).