Si quieres ser feliz …

 La raíz del sufrimiento de la corporalidad, la mente-emocion y la espiritualidad, es el apego.

Hemoss creado un espacio en nuestra mente que mantiene a ese objeto, idea, situación o persona como parte de ti mismo.

Cuando se critica, se desprecia o deja de estar contigo esa idea, persona u objeto, sientes dolor en la mente, tienes el sentimiento de pérdida.

Si quieres ser feliz has de aprender a amar y apreciar, manteniendo al mismo tiempo tu independencia.

Su luz atraviesa mis tinieblas

Jesús es la Luz. Él mismo nos dice “quien cree en mi no camina en tinieblas porque tendrá la luz de la vida”

En la Escritura encontramos testimonios estremecedores de ausencia de luz. Baste como ejemplo el aullido de Job:

Carta a Jesús

Hola Jesús, ¨Mi¨ carpintero:

No puedo dejar pasar este día. Un día de vida y un nuevo comienzo.

No puedo dejar pasar este día sin tenerte presente y con el alma agradecida. Agradecido por estos últimos 32 años y por estos 49 años.

A veces pienso en el hombre que no fui.

¿Cómo hubiese sido mi vida sin ti? Sin tu presencia, sin tu ausencia, sin esta dinámica, a veces extraña, en la que nos movemos TÚ y yo.

¿Qué hombre hubiese sido?

“Lázaro, sal fuera”. (Jn 11, 1- 45)

La muerte y la vida, dos caras antagónicas de nuestro pensamiento. Jesús se expresó claramente: “Lázaro ha muerto, pero yo iré a despertarlo”. Tengo la percepción de que todos necesitamos en nuestra vida despertadores, timbres, señales que nos hagan descubrir que la vida y la muerte son un proceso de plenitud.

Cuando Tu Palabra se hace piel en mi vida

No puedo vivir sin mi piel, no la dejo doblada encima de la silla de mi habitación o colgada en el armario. No la mudo, no la cambio… va siempre conmigo, aunque no siempre me agrade…