El bien común para Aristóteles es el bien que es bueno, porque es común. No es que suba el PIB y luego lo repartamos (a unos más y a otros menos). El bien común se configura en un hagamos y construyamos algo juntos, que será valioso no porque sea más o menos, sino porque lo hemos hecho juntos. Es como si ante el problema de dos niños peleándose por el mismo juguete, se plantea la solución de comprar otro juguete para que cada niño juegue con el suyo. Esa solución no busca el bien común, porque el milagro del bien común es aprender a compartir, porque la felicidad no es tener tu propio juguete, sino compartir algo juntos. Los amigos para Aristóteles son los que se quieren porque están construyendo un proyecto común, que es bueno, porque es compartido: un bien común, una felicidad no privatizada.
https://crismhom.org/etica-de-felicidad-virtud-y-amistad-basada-en-el-nuevo-testamento