La archidiócesis de Madrid, a través de la Delegación de Laicos, Familia y Vida ha comenzado un servicio de acompañamiento a las familias con miembros LGTBI. Según se anuncia en la nota de Alfa y Omega y en Revista Ecclesia se trata de evitar «toda discriminación» y asegurar «un respetuoso acompañamiento».
Todos los detalles de esta iniciativa tan necesaria se darán a conocer en septiembre, aunque de momento ya se ha adelantado que el próximo curso continuará un plan de formación para fundamentar desde las diferentes disciplinas de la teología este acompañamiento.
A través de este servicio, la archidiócesis de Madrid se sitúa abiertamente a favor de acogida de la diversidad sexual y de género en su seno. Se trata, sin duda, de un buen paso, un paso en la dirección de la puesta en valor y la celebración de la diversidad en la Iglesia, un paso en el seguimiento fiel a Jesús.