Hoy, jueves 25 de agosto, nuestro hermano Alberto nos invita a sentirnos agradecidos ante el Señor.
Fomentar la actitud de acción de gracias como hilo conductor de nuestra vida es una forma de reconocer todo lo que recibimos de los demás y de Dios. Es un camino para caer en la cuenta de que la vida es un regalo y de que todo, incluso de lo malo, se puede sacar algo bueno. Hacer memoria agradecida de los acontecimientos de nuestra vida es una forma de descubrir el rostro de Jesús de Nazaret, que se hace presente en nuestra vida en cada cosa que nos pasa. Una mirada agradecida de nuestra historia pasada y presente, nos ayuda a contextualizar lo que nos pasa para encontrar todo lo bueno. Porque Dios se hace presente, se encarna en nuestra vida cotidiana, quiere estar junto a nosotros. Porque nuestra felicidad proviene de reconocer esa presencia, identificar la vida como un regalo. Porque en la actitud de agradecimiento, las dificultades nos modelan para encontrar siempre algo positivo y bueno. Hoy damos gracias a Dios con cada nuevo día.