Buenos días, Señor

Buenos días, Señor, a ti el primero que encuentra la mirada del corazón apenas nace el día. Tú eres la luz y el sol de mi jornada.

Buenos días, Señor, contigo quiero andar por la vereda. Tú, mi camino, mi verdad, mi vida; Tú la esperanza firme que me queda.

Buenos días, Señor, a ti te busco. Me abandono en tus brazos amorosos, al despertar la aurora. Quiero que me cuides, me protejas y me guíes. Quiero encontrarte siempre en mis hermanos.

Buenos días, Señor resucitado, que traes la alegría al corazón que va por tus caminos.

¡Vencedor de tu muerte y de la mía!


Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad