Con qué poco te contentas mi Dios! Solo pides que te ame y tu corazón se abre y ¡derrama TODO!
Si fuera tan fácil con el corazón orgulloso de los hombres….
Creo que LA PALABRA se encarna en nuestra vida y en el vivir se expresa.
Habrá milagros hoy…. ¡Si tienes FE!
En mis épocas monásticas, luego de las Completas, salía un poco al campo para disfrutar del silencio nocturno. Una noche me detuve en las estrellas del cielo. Lejos de las ciudades y en medio de las sierras, las estrellas se nos muestran tal como son.
La primera promesa de Dios a Abraham, el nacimiento del monoteísmo, fue: “De cierto te bendeciré grandemente, y multiplicaré en gran manera tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena en la orilla del mar, y tu descendencia poseerá la puerta de sus enemigos.”Génesis 22:17. Un hecho totalmente imposible en la situación que todos conocemos y que vivía, en ese momento, Abraham.
Esa noche mirando las estrellas comprendí que aquella promesa se cumplía en mí y en el pueblo cristiano. Miles de años después, un novicio cristiano e hijo del pueblo judío por bautismo, comprendía que era parte de esa promesa dada a Abraham. No pude más que maravillarme una vez más en Dios.
Ashira, Cantemos y Bendigamos al Señor!
El Dios de Israel, nuestro Dios, libro a su pueblo de las cadenas. Él nos libra también de nuestras esclavitudes internas: ¿a qué temeré? Habrá milagros hoy…. ¡Si tienes FE! No hay miedo en mi interior… En tu misericordia ¡TÚ nos diriges! Los invito a entonar un cantico en honor del Señor junto a Moisés. (Éxodo 15)
Cantaré al Señor, que se ha coronado de triunfo
El Señor es mi fuerza y mi cántico; ÉL es mi salvación.
Él es mi Dios, y lo alabaré; es el Dios de mi padre, y lo enalteceré.
El Señor es un guerrero; su nombre es el Señor.
Tu diestra, Señor, reveló su gran poder; tu diestra, Señor, despedazó al enemigo.
¿Quién, Señor, se te compara entre los dioses? ¿Quién se te compara en grandeza y santidad?
Tú, hacedor de maravillas, nos impresionas con tus portentos.
Por tu gran AMOR guías al pueblo que has rescatado; por tu fuerza los llevas a tu santa morada.
Por tu gran poder, Señor, quedarán mudos como piedras
Hasta que haya pasado tu pueblo, el pueblo que adquiriste para ti.
Tú los harás entrar, y los plantarás, en el monte que te pertenece;
En el lugar donde tú, Señor, habitas; en el santuario que tú, Señor, te hiciste.
¡El Señor reina por siempre y para siempre!
Como compartí la semana pasada, el trabajo que Dios hace en mí y yo en ÉL, desde hace años, se constituyó como una Asociación de alcance nacional. Desde que este hecho comenzó a gestarse no pude más que agradecer a Dios y comprobar cómo, en su misericordia, Él nos dirige. También me encontré, en una entrevista, volviendo a hablar como las idolatrías humanas no nos permiten tener FE
Los humanos tenemos la tendencia de idolatrar. Idolatramos nuestros esquemas de creencias, nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestras iglesias, nuestros miedos, nuestros seres queridos, nuestra propia vida, etc, etc, etc. Colocamos todo ello en el lugar en donde solo Dios debe estar dirigiendo nuestra vida. Y un ser verdaderamente espiritual no es nada más que un hombre o mujer que, simplemente, ha dicho “SI” a un camino de regreso a la Unidad interna, y con Dios, sin idolatrías. Un alma que aprende lo más importante: escuchar a Dios y reflejar ese amor depositado dentro de sí! Que trabaja en la unión de su naturaleza, la mente, las emociones y el ser con el fluir de la vida, en una unión de constructores, compañeros y esposos. Sin idolatrías podemos tener Fe y, depositados en sus manos, que Dios haga lo que a Él mejor le parezca.
Habrá milagros hoy…. ¡Si tienes FE! Los invito a decir “SI”.
Salmo 39,5.7-8a.8b-9.10 (TODOS … sin prisas y escuchando)
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad. Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor,
y no acude a los idólatras, que se extravían con engaños.
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y, en cambio, me abriste el oído; no pides sacrificio expiatorio, entonces yo digo: «Aquí estoy.» –Como está escrito en mi libro– «para hacer tu voluntad».
Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas.
He proclamado tu salvación ante la gran asamblea; No he cerrado los labios: Señor, tú lo sabes.
Cristo nos pide FE, nos deja paz, nos pide no tener miedo, hace morada en nosotros, nos entrega SU amor y reza por nosotros en Getsemaní. ¿Qué más necesitamos para decir “SI”? Habrá milagros hoy…. ¡Si tienes FE!
Juan 14 y 17
No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
¿No crees que YO SOY en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.
De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.
El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.
La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti;
He manifestado tu nombre a los hombres que del mundo me diste; tuyos eran, y me los diste, y han guardado tu palabra.
Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros.
Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.
Más no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,
Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.
Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.
Espacio de silencio (10 minutos).
Espacio para compartir peticiones, vivencias y acción de gracias.
Habrá milagros hoy…. ¡Si tienes FE! Tener Fe es confiar. Tener FE es obrar en Dios. Tener FE es dejarse llevar. Tener Fe es escuchar. Tener Fe es trabajarse desde Dios. Tener Fe es esperar. Tener Fe es AMAR. Tener Fe es orar. Habrá milagros hoy…. ¡Si tienes FE!
Pidámosle todo esto al Padre
Los invito a darnos las manos nuevamente y pedir en común unidad por la comunidad.
BENDICIÓN El Señor nos bendiga y nos guarde; nos muestre su rostro y tenga misericordia de nosotros y nosotras. Vuelva su rostro a nosotros y nos conceda la paz. El Señor nos bendiga, hermanos y hermanas. Amén.
Canto final: Himno de la Alegria