Palabra de acogida: Bienvenidos todos, hermanos, a esta contemplación de la Palabra; parece que la palabra es apenas escuchada, oída distraídamente las más de la veces.
Pero yo os propongo una contemplación más que una escucha, la Palabra es el Verbo de Dios, y en esta sociedad en que todo es ruido estridente, palabras vacías, música de relleno, cuesta escuchar, todos queremos hablar, hablamos a la vez, nos interrumpimos unos a otros, pero es en el silencio en que se oye la Palabra, estamos sordos, tenemos oídos y no oímos, como tenemos ojos y no vemos.
Os invito al silencio, a la escucha, a la contemplación de lo que pasa al lado de nosotros, de la suave brisa en que esta Dios.
Shemá Israel, Deuteronomio 6,4
“Oye, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor.
Ama al Señor, tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.
Graba en tu mente todas las cosas que hoy te digo,
ensénaselas continuamente a tus hijos;
háblales de ellas tanto en casa como en camino,
cuando te acuestes y cuando te levantes.”
Palabra del Antiguo Testamento.
La Creación por la Palabra Génesis 1, 1ss
“En el comienzo de todo, Dios creó el cielo y la tierra.
la tierra no tenia entonces forma alguna;
todo era un mar profundo cubierto de oscuridad,
y el espíritu de Dios se movía sobre las aguas.
Dios dijo “Haya luz!”
Y hubo luz. Al ver que la luz era buena, la separó de la oscuridad
y la llamó “día,” y a la oscuridad la llamó “noche”.
De este modo se completó el primer día.
…Así fue, y vio Dios que todo lo que había hecho era bueno, muy bueno.”
Palabra en San Pablo. Gálatas 3, 22-29 Todos sois hijos de Dios.
“Hermanos,
La Escritura presenta al mundo entero prisionero de pecado, para que lo prometido se dé por la unión en Jesucristo a todo el que cree en él.
Antes de que llegara la fe, estábamos prisioneros, custodiados por la ley, esperando que la ley se manifestase.
Así, le ley fue nuestra niñera, hasta que llegara Cristo y Dios nos aceptara por la fe.
Una vez que la fe ha llegado, ya no estamos sometidos a la ley, porque todos somos hijos de Dios por la fe en Cristo Jesus.
Los que os habéis incorporado a Cristo por el bautismo, os habéis revestido de Cristo.
Ya no hay distinción entre
judíos y gentiles.
esclavos y libres,
hombres y mujeres,
homosexuales y heterosexuales
porque todos sois uno en Cristo Jesus.
Y si sois de Cristo, sois descendencia de Abraham
y herederos de su promesa.”
Palabra del Evangelio. Juan 1,1ss
En el principio era la Palabra.
“Al principio existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios,
y la Palabra era Dios.
Al principio estaba junto a Dios.
Todas las cosas fueron hechas por medio de la Palabra
y sin ella no se hizo nada de todo lo que existe.
En ella estaba la vida,
y la vida era la luz de los hombres.
La luz brilla en las tinieblas,
y las tinieblas no la recibieron.
Apareció un hombre enviado por Dios,
que se llamaba Juan.
Vino como testigo,
para dar testimonio de la luz,
para que todos creyeran por medio de él.
Él no era la luz,
sino el testigo de la luz.
La Palabra era la luz verdadera
que, al venir a este mundo,
ilumina a todo hombre.
Ella estaba en el mundo,
y el mundo fue hecho por medio de ella,
y el mundo no la conoció.
Vino a los suyos,
y los suyos no la recibieron.
Pero a todos los que la recibieron,
a los que creen en su Nombre,
les dio el poder de llegar a ser hijos de Dios.
Ellos no nacieron de la sangre,
ni por obra de la carne,
ni de la voluntad del hombre,
sino que fueron engendrados por Dios.
Y la Palabra se hizo carne
y habitó entre nosotros.
Y nosotros hemos visto su gloria,
la gloria que recibe del Padre como Hijo único,
lleno de gracia y de verdad.
Juan da testimonio de él, al declarar:
«Este es aquel del que yo dije:
El que viene después de mí
me ha precedido,
porque existía antes que yo».
De su plenitud, todos nosotros hemos participado
y hemos recibido gracia sobre gracia:
porque la Ley fue dada por medio de Moisés,
pero la gracia y la verdad nos han llegado por Jesucristo.
Nadie ha visto jamás a Dios;
el que lo ha revelado es el Hijo único,
que es Dios y está en el seno del Padre.”
Momentos de escucha en el silencio 10’
Palabras de los Santos en Jesus.
Peticiones, Bendiciones, Agradecimientos.
Padrenuestro:
Oración Comunitaria:
Amén.
Bendición Mutua.
Que el Señor nos bendiga y nos guarde, nos muestre su Rostro, tenga misericordia de nosotros y nos conceda la paz. Amen.